03/02/2017
Una alumna de 16 años de un instituto de Calatayud fue atacada en el patio de recreo escolar por una joven de 20 que se coló en el centro con el único propósito de agredirla, como represalia por la relación de amistad que mantiene con su expareja. La agresora contó con la colaboración de dos alumnas, que la ayudaron tanto a entrar al instituto como a buscar a la víctima, según informó ayer la Policía Nacional.
Los hechos ocurrieron en la mañana del pasado 24 de enero. La noche anterior la joven de 20 años había amenazado a la menor a través de varios whatsapp con "romperle los dientes" por la mencionada relación. Cumpliendo su amenaza, la agresora, que no es alumna del instituto, se presentó en el centro escolar durante la hora del recreo y, con la ayuda de otras dos jóvenes, localizó a la víctima. Nada más verla, la abordó y, tras mediar cuatro frases, según la denunciante, aprovechó un descuido para atacarla y darle varias patadas en la cara, "De no ser por la mediación de las amigas de la agredida el desenlace podría haber sido mucho peor", subrayaron fuentes policiales.
La joven de 20 años, cuya identidad no fue facilitada, aprovechó el alboroto y el desconcierto que se formó tras la agresión para escapar del centro, mientras las amigas de la agredida la llevaban a la jefatura de estudios para dar cuenta de lo acontecido. Sobre las 15.00, tras recibir asistencia médica, la menor acudió con sus padres a la comisaría de la Policía Nacional de Calatayud para denunciar los hechos. La joven presentaba lesiones evidentes en la cara, en concreto una erosión en el maxilar superior izquierdo, un golpe en la nariz con restos de sangrado y una fractura en el incisivo izquierdo, todas ellas causadas por las patadas recibidas en la cara.
Puesta en libertad
Poco después, la autora era detenida para ser interrogada y practicar las diligencias oportunas, que fueron remitidas al juzgado de guardia. La agresora quedó en libertad, en condición de investigada por un delito de lesiones.
La Jefatura Superior de Aragón explicó ayer que antes de las vacaciones navideñas se produjo un hecho similar que acabo sin resultados graves, gracias a la rápida intervención de quienes presenciaron un conato de pelea en las puertas de un centro educativo. Por esa razón, desde que comenzó el periodo escolar tanto la Policía Nacional como la Policía Local han intensificado su presencia en el horario lectivo y, en especial, a las entradas, salidas y durante los recreos, ya que son los momentos en los suelen producirse los enfrentamientos.
Dentro del Plan Director puesto en marcha hace años, en colaboración con los profesores, para combatir el acoso escolar y episodios de violencia como el último, la Policía recuerda a los jóvenes que es "muy importante" que si se enteran de que se ha producido lo que llaman una ‘kedada’ entre grupos y quieren ayudar a la persona que puede ser agredida, avisen al 091. "Este tipo de enfrentamientos a veces se anticipa por Whatsapp u otras redes sociales.
Los amigos de las víctimas pueden evitar males mayores si avisan a sus profesores o directamente de forma anónima al 091 para que la policía actúe a tiempo", señalaron estas fuentes.
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